La obra presenta a un ser dorado de otra dimensión de ojos grandes oscuros que pareciera estar envuelto en un manto de filigrana dorada mirándonos desde el infinito. Este ser flota en su propia dimensión compuesta por un mosaico de texturas diversas en plateado, rodeadas por bordes anchos de un pespunte dorado. Tiene una huincha ancha a la izquierda con formas que van dispuestas de forma vertical. A la derecha tiene otra huincha mas delgada que también cae de forma vertical